Obturador
Luego de que se desmontó Área Verde, el proyecto continuó de diferentes formas. Obturador es la compilación de los distintos momentos que le siguieron.
Como primer momento, planteé una serie de interrogantes en La Carpa sobre la educación y la institucionalidad artística. Con los restos de la malla generé un espacio de diálogo en el patio central de la escuela, donde recibí a las distintas personas que la componían: alumnos, profesores y trabajadores. Durante la conversación intercambiamos perspectivas, preguntas y posiciones las cuales finalmente construyen el imaginario colectivo que existe en la escuela.
Esto me permitió relacionarme y pensar en esa comunidad constituida por los diferentes roles que existen en el campo del arte y definir una posición como artista. Así como hacer uso de las diferentes herramientas que el proyecto me ofrecía: la acción colaborativa, la performance, la crítica institucional, etc.
Asimismo me interesó cuestionar los límites y la forma de la obra de arte ya que el reconocimiento y el valor de la misma, se encuentran en el intercambio, la reflexión y el impacto directo con quien viva la experiencia, más allá del objeto como algo concreto.
La Carpa. Malla Raschel. 200cm x 200cm. 2018.
Vista interna de La Carpa. 2018.
‘’Un espacio para las relaciones humanas que sugiere posibilidades de un intercambio distinto a los vigentes en el sistema. No considerar la obra de arte como un espacio por recorrer sino como una duración por experimentar, como una apertura posible hacia un intercambio ilimitado’’
-Nicolas Bourriaud
Instalación. Malla Raschel. 400cm x 300cm. 2018.
El tercer momento consistió en trasladar la experiencia de la carpa, menos concreta en términos artísticos, por su condición efímera y dialógica, a un soporte más legible en un lenguaje de arte contemporáneo. Consciente de las exigencias y expectativas que la misma institución artística –en este caso la educativa- tiene de sus operadores, me pregunto si esta forma de traducir y representar la experiencia del intercambio dentro de lo visual es suficiente para contener lo investigado. El resultado es una estructura simbólica, casi abstracta, que uno atraviesa con cierta dificultad. Un artefacto visualmente atractivo que genera preguntas de diversa índole: por su condición de pieza contemporánea, las decisiones en el recorrido, etc.
Reloj de Sol. Hilo sobre foto y video. 21cm x 29.7cm. 1min. 2018.
El proceso de producción dentro de una escuela está determinado por fechas de presentación, una manera también de situar el tiempo artístico dentro de un tiempo de producción. El cuarto momento (Reloj de Sol) parte de la reflexión sobre la educación artística, sus límites y tiempos, presento un reloj que la propia arquitectura de la escuela y la luz del sol ofrecen. El paso de la luz trabaja como un recordatorio constante del paso del tiempo, en el inconsciente entre los que estudiamos, trabajamos y nos desenvolvemos en este espacio.
¿El tiempo del arte como tiempo de producción? ¿De consumo? O ¿De libertad?
Dibujo. Tierra de color sobre kraft. 235cm x 240cm. 2018.
Dibujo. Tierra de color sobre kraft. 150cm x 250cm. 2018.
Dibujo. Tierra de color sobre kraft. 300cm x 250cm. 2018.
Para el quinto momento, el cual fue en paralelo a toda la investigación anterior, experimenté con Dibujo. Como una manera de plasmar en un formato más plástico, abstracto y visual todas las ideas y emociones que me iba dejando la investigación. Lo que vemos son unos dibujos de formato amplio que capturan el gesto y la expresión desde la emoción que acompaña este camino de preguntas. A partir de un enfrentamiento con el papel, surge una mirada, una representación desde lo personal.